ESTRUCTURA DE LA PLEGARIA
BESTIARIO
PRUDENCIA

La prudencia es la virtud cardinal que nos permite discernir sobre Dios. La personalizo con una virgen de tres rostros dentro de un laberinto. Las tres caras son el pasado, presente y futuro; son la memoria, inteligencia y providencia. Porta un espejo que se proyecta hacia uno de sus aspectos, al otro brazo lo envuelve una serpiente; el reflejo se interpreta como el discernimiento; la sierpe, como la sensatez. Bajo el pie izquierdo reposan dos máscaras desechadas que señalan el don insuflado por Dios en el entendimiento para descartar lo nocivo y aceptar la madurez, sabiduría y buena acción para dirigirnos hacia otras almas. Hay que ser prudentes como serpientes y sumisos como corderos. Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra.
